PLUMA EN PIE DE GUERRA (Poema 114)
Vi tu tristeza ena aquella noche fría
Ante la mesa que se quedó vacía
Oí el silencio de risas de tus hijos
Y tu voz quebrantada
Que su suerte maldijo
Vi tu pena inmensa de pájaro vencido
Y ni el mal vino te trajo el olvido
Vi tu ilusión cayendo de rodillas
Clamando a Dios una migaja
De sus maravillas
Vi tu dignidad horadada, gota a gota
Por el cobarde que calla
Y por el cruel que te explota
Vi muchos detrás de ti
Seguir por la misma senda
Y a la señora Justicia
Que se ha quitado la venda
Sé que estos versos
No aliviarán mi alma
Ni llenarán tu plato
Ni te traerán la calma
Entonces ¿para qué el perfume
Y el color?
¿Para qué el canto del jilguero?
¿Para qué el nido del hornero
Y el vuelo del picaflor?
Entonces, mis manos serán tus manos
Entonces mi voz, será tu voz
Entonces, pondré mi pluma
En pie de guerra
¡ Hasta que haya justicia en nuestra tierra!
BALADA PARA LA PAZ (Poema 113)
Almas malvadas, arrasan las casas
Manchan las playas, matan manadas
Mandan a trabajar a la gran masa
¡ Mas nada pagan!
Malgastan la plata al lanzar balas
A mansalva, para aplastar
Almas malsanas,
Marcan las cartas, para ganar
Camarada ¡Basta ya!
Salta las vallas, da la batalla
Hasta alcanzar la vasta playa,
Arma la balsa para zarpar
Cada palada a la mar
Agrandará las ganas
Cada palada a la mar
Hará sanar las llagas
A la mañana amarrarás la balsa
A la atalaya sagrada, para cantar
La balada más amada, jamás cantada
¡ La balada para la paz!
Allá cantarás la balada más amada
La balada para la paz
¡Agallas! ¡Jamás parar, hasta ganar!