ESTABA MIRANDO(Poema 153)
El árbol verde-botella
sujeta mi carne de ahorcado
Me sumerjo un instante en lo oscuro
No puedo caer, más que hasta el fondo
Revuelco con furor, estas ideas negras
¿Quién tiene la llave para cerrar la herida?
¡Todo está en ese poema que jamás escribiré!
Salgo a la calle, voy tan lleno de lluvia
manchado de barro, pisando baldosas flojas
¿La vida es esto? digo y escribo,
Porque si las palabras, no hacen el amor
¿Qué diré entonces cuando finalmente
pasen lista?: No soy de acá, yo tan solo
¡ Estaba mirando!
NADA VUELVE (Poema 152)
Se difuminan tus manos
y no hay saludo final
La nada está ahí nomás
a la vuelta de sus ojos
Que corta fue la eternidad
Desespera saber
Que es en vano la espera
¡ Desespera saber!
Triste muerte súbita
de un sueño,
Que se olvidó de respirar
O le faltó un beso,
para despertar
Encendiste tu radio a pilas
Tu soledad apilas
Noche cuerva
enojo de perro rabioso
Y llano ves ¡ ya no ves!
Descubriste al fin,
que nada vuelve
La ola que estalla, es mar
otras esperan detrás
Y si regresa, será otra
la orilla que besará
¡ Cuesta todo tanto en la vida!
Todo, menos hablar
Sentados en su sillón
te hablan de saltar
Asidos del pasamanos
te hablan de soltar.
ENTERRANDO A TUS PECES
(Poema 151)
Una de esas noches
en que el alcohol
hace hablar a los dolores
de la vida, me preguntaste
¿ Cómo puedo estar tan solo?
Una respuesta surgió,
del fondo de mi vaso:
Lo raro es que siempre,
trates de escapar
cuando nadie te persigue.
Si envenenas el agua
Si a cada paso la embarras
Si no tienes agallas
No es extraño que estés,
enterrando a tus peces.