SUMERGIDO EN UN RÍO DE CABALLOS (Poema 98)

SUMERGIDO EN UN RÍO DE CABALLOS
(Poema 98)


Sumergido en un río de caballos
Galopando indómitos
Colgado del talón del viento
Que me arrastra impunemente

Hincándole el colmillo
A la yugular del sol
Que se apaga desangrándose
Iluminado apenas, por el fuego
De unas flores marchitas

Oliendo el vértigo
De la eternidad
Afrontando un silencio de muros
Te digo ¡No puedo más!

Un círculo de insectos en la luz
Inmolándose, en su danza kamikaze
Hedor de rosa enferma, en la solapa
Insoportable para el alma desahuciada

Tu iris de órbita súblime
Pupilas del aura de la luna,
Mis manos que no saben mentir
Acarician la nada inpenetrable

Mientras presiento en mi piel
Vestigios de un beso inexistente,
Si ni siquiera alzaste la mano
Para decirme adiós
¿Tan pronto oscurece por aquí
Que ya no puedo verte?