ESE NIÑO QUE FUI, CUANDO NO TENÍA BIGOTE (Narración 2)
ESE NIÑO QUE FUI, CUANDO NO TENÍA BIGOTE
(Narración 2)
Cuando no tenía bigote y estaba en tercer grado, o sea hace mucho tiempo, no existía la palabra Bullying, pero el bullying existió siempre.
Nunca fui un héroe, pero eso de muchos contra uno, siempre me cayó muy mal y me ponía del lado del más débil.
Elsa a los ocho años, fue mi primera novia, o algo parecido.
Elsa era una hermosa japonesa, lo que más me gustaba de ella, era que cuando sonreía se le hacían unos hoyitos en las mejillas y Elsa sonreía casi todo el tiempo, salvo cuando los chicos se estiraban los ojos para hacerse los japoneses o imitaban su forma de hablar.
Entonces cuando se burlaban, ella los corría por el patio y los pibes se escapaban gritando "TU KULITO SAKAYAMA"
y otras pavadas por el estilo.
Como también tenía problemas con la ortografía, me fui acercando con la excusa de ayudarla en Lenguaje, pero en realidad era que me atraía y no me gustaba que la molestaran.
Elsa a su vez era muy hábil con la tijera y el papel glacé( en eso siempre fui un tronco) así que nos ayudábamos mutuamente.
Todo iba muy bien, tanto, que un día decidí expresarle mis sentimientos. Y lo que no me animaba a decirle cara a cara, lo puse en una amorosa cartita, que metí en su cuaderno sin que me viera.
Nunca me contestó, pero tampoco dijo que no y como todo seguía igual ¡para mí fue un sí!
Mi vieja creo que algo sabía, porque en un acto del 9 de julio, nos sacó una foto juntos, en la que yo le paso el brazo por los hombros a Elsa, mientras ella sonreía.
Pero unos días después, llegó la desilusión. Estando ambos en el patio, Elsa se acercó y me dijo: "Mis padres dicen que somos muy chicos para jugar a los novios" y corrió al otro lado a saltar el elástico, mientras que yo, con el corazón roto, me fui a jugar a la mancha venenosa.
De esta manera, el mundo se perdió otros John y Yoko.
En todo este tiempo transcurrido, he tratado de cuidar a ese niño que fui, porque créanme no hallarán en mí, nada mejor, ni más valioso.
Podrán decir que soy un soñador
¡ Pero no soy el único!
No hay comentarios:
Publicar un comentario