Gesticulan las sombras nocturnas Desarrapadas hojas del delirio Un chasquido de fósforos cantores Humo pensativo en volutas histéricas Quemadura de sueños narcotizados
Mi vida vacía se llena en los odres Ideas pudriéndose en mi cerebro Empeñado en sufrir hasta el fin Un sentimiento de vértigo cristalizado Este ojo mental me penetra, me asquea Vomito mi carne agrietada
Esta náusea de existir sin vos Con voz reventada, Racimo de amígdalas pestilentes Alcohol, izado en mis vísceras Seducción de viejo verde Y sus ojos de vidrio
Mirada atroz de espejo pordiosero Sólo sé, que veo doble mi tristeza ¡ Nada sin vos! Nada sin vos, mi alma Entonces, no puede más que ahogarse ¡ En este río amarillo !